jueves, 20 de marzo de 2014

CONFESIONES SOBRE HIJOS NO NATURALES

Cuando Repollete y Princesita eran dos preciosos bebotes que iban en su sillita gemelar me crucé varias veces con personas que sin ningún pudor me preguntaban si eran de tratamiento, generalmente mujeres mayores que luego me añadían que su hija o nuera estaba en ello, también alguna pareja más joven y en alguna ocasión cotilleo puro y duro.
La mayoría de la gente que se cruza con una sillita gemelar deduce inmediatamente que son fruto de un tratamiento de fertilidad, sobretodo si la madre es “mayorcita”, la mayoría no lo duda… aunque todavía los hay que se preguntan el por qué del aumento de mellizos.
En sitio donde vivo es exagerado el número de mellizos que hay, si hago cuentas conozco unas 20 parejas menores de 5 años… muchas se de forma directa que son de tratamiento y otras que yo misma pensaba que lo serían simplemente son por herencia, mismamente mi vecina de abajo tiene en su familia varias primas con mellizos y siempre los ha habido en su familia.
Yo misma cuando me cruzo con una sillita gemelar presupongo que son de tratamiento, aunque se que hay otros factores como el uso continuado de anticonceptivos, la edad o problemas hormonales que pueden condicionar el tener mellizos. Pero si somos realistas en la gran mayoría de los casos nuestra amiga la ciencia ha tenido algo que ver.
¿Por qué os suelto este rollo?, bueno…. Porque esta semana he tenido tres conversaciones-confesiones que me han dejado sorprendidas y me han hecho darme cuenta de la gran necesidad de hablar que tenemos las infértiles, la necesidad de compartir, la necesidad de que nos escuchen….
El lunes estaba yo con mis cachorros jugando en el parque, bueno, en realidad ellos jugaban y yo me aburría soberanamente sentada en un banco…. Cuando se me acercó la mamá de una niña del cole que además es mi vecina. Es una mujer extrovertida y abierta con la que he hablado alguna vez de las típicas cosas que hablan las madres. Total que va y me suelta:
-¿Son naturales? Me refiero a Repollete y Princesita.
La pregunta me sorprendió, sin embargo no me molesta en absoluto que me la hagan.
Creo que a ella no le importaba en absoluto la respuesta porque directamente siguió hablándome:
-Te lo digo porque yo estuve embarazada de mellizos y claro cuando veo mellizos me quedo medio embobada…. Mi segunda hija (tiene tres hijas) fue por FIV y eran mellizas, pero una se paró a las pocas semanas y cuando te veo con los tuyos me hace mucho recordar que yo también hubiera tenido mellizos…
Ella se quedó pensando en sus cosas y yo me quedé con la respuesta sobre si Repollete y Princesita eran naturales en la boca. Me quedé sorprendida de que me contara algo tan íntimo y supuse que quizá ella lo contaba con naturalidad a todo aquel que quisiera escucharle o que quizá directamente presupuso que Repollete y Princesita eran fruto de la ciencia y quiso compartir conmigo que ella también tuvo que someterse a tratamiento y que tras esa pérdida se quedó a los dos años embarazada “misteriosamente” de su tercera hija.

Habitualmente no tengo problema en decir que Repollete y Princesita son de tratamiento, no me importa, no es un secreto, en casa hablamos de ello con total naturalidad y mis hijos están creciendo oyendo determinadas cosas que irán asumiendo como parte de ellos.
Pero me sorprende que extrañas te hablen directamente de tratamientos y pérdidas gestacionales…

El martes tuve una conversación similar, esta vez esperando la salida de los niños del cole, una mami de la clase de al lado se puso a hablarme sobre la cantidad de mellizos que había en nuestro pueblo, y de repente me soltó que su hermana estaba en tratamiento y que le acababan de dar el positivo, estaba de mellizos y había sido por donación de semen…. Yo me quedé alucinada con la confesión y me pregunté si en el caso de que hubiera sido donación de ovocitos también me lo habría dicho. Porque en esto de la donación de gametos sigue existiendo cierta diferenciación, no es lo mismo donación de esperma que de ovocitos y muchas mujeres siguen pensando que es más fácil asumir una cosa que otra porque ellas viven él embarazo y ellos no… incluso algunas siguen sintiendo casi que están cometiendo una “infidelidad” o algo parecido.
Esta madre según me hablaba daba totalmente por echo que Repollete y Princesita eran fruto de un tratamiento, para ella no había otra posibilidad…. Me pregunto que habría pasado si su hermana se enterase de que iba por ahí aireando su tratamiento.
Entiendo que una mujer que está pasando por eso busque el hombro de otra para contarle su caso y más cuando sospecha que su interlocutora ha pasado por lo mismo, pero no entiendo que familiares y amigos vayan por ahí contando tu vida.

El caso es que hoy tuve otro momento “Confesiones” y esta vez más sorprendente. Hoy fui al pediatra con Repollete que andaba con fiebre. En la sala de espera me encontré con una madre y su hija que van a clase con Repollete y Princesita, yo a la madre la conozco de vista porque llevaba a su hija a la misma guardería a la que iban Repollete y Princesita.
Es una chica tímida, y reservada, se la nota… el caso es que empezamos hablando de lo guapos que están nuestros niños y terminamos hablando del peso de ellos, le conté que Repollete nació con 1.800 y que para mi es maravilloso verlo ahora tan grande… y entonces ella se soltó y me contó que estuvo 9 años de tratamiento de fertilidad y que se quedo embarazada de mellizos que nacieron prematuros con 500 gramos y que murieron los dos al poco tiempo.
Casi me atraganto y reconozco que no supe que decirla… luego me decía que cada vez que me ve con mis niños se acuerda de todo aquello… y que simplemente al poco tiempo de aquello se quedó embarazada de su hija M. Solo pude felicitarla por haber logrado tener a su M aunque entiendo y comprendo que el dolor de esa pérdida le acompañará siempre…
No se muy bien que le llevó a contarme eso… ya os digo que no tengo especial relación con ella, salvo el educado “hola y adiós” y poco más… pero vi en su cara dolor, mucho dolor, vi la necesidad de hablar sobre ello, la necesidad de encontrar a alguien con quien hablar de su pérdida y de esa lucha de 9 años contra la infertilidad.
Esas tres conversaciones con casi extrañas me hacen darme cuenta de que en esto a veces estamos muy solas, que a veces un blog o un foro nos sirve de desahogo, o una extraña con la que creemos compartimos algo.
Una de las cosas que más me llena de escribir este blog es precisamente pensar que le sirve a alguien para sentirse identificado de una u otra forma… no estamos solas, somos muchas, pero seguimos escondidas… seguimos sintiéndonos culpables, seguimos sintiéndonos raras… pero creo que la mejor forma de ayudarnos a nosotras mismas es salir del armario para que las que vienen detrás no se sientan solas.
A mi misma en mi vida fuera del blog me echa para atrás hablar de ovo salvo en un círculo limitado, y sigo sin saber muy bien que responder ante aquellas personas que directamente dan por echo que mis hijos son fruto de tratamiento.

miércoles, 19 de marzo de 2014

TE QUIERO PAPÁ

De Repollete y Princesita para Papimelli...

"Te quiero Papá, cuanto te quiero...
te lo he dicho mil veces, solo con besos,
pero como hoy es tu día rompo el secreto...
Te quiero papá de aquí hasta el cielo"


Princesita y Repollete se han aprendido esta poesía en el cole... llevan días diciéndome que tienen un secreto y que V. su profesora no les deja decírselo a su papá... pero al final mis dos personitas favoritas se la contaron antes.
Dedicada al mejor padre que podrían tener mis hijos y a la persona con la que llevo compartiendo media vida.
Y también a mi padre que me dió la vida y que supo decirme sin saberlo justo lo que yo quería oír cuando me sometí a una ovodonación.

martes, 18 de marzo de 2014

REFLEXIONES DE UNA PRINCESA QUE CADA DÍA ES MÁS BRUJA




Ibamos el otro día paseando por el casco histórico de nuestra ciudad... pasamos por un muro donde estaba pintado el cuadro que veís arriba... Princesita se para, lo observa, frunce el ceño y me dice:
"Mira Mami, eso lo pintó Joan Miró".
Papimelli me mira, yo asiento y de nuestra cara de asombro deduzco que cuando su profesora dice que trabajan obras de arte y sus autores en clase es cierto.


Vamos por la calle camino del colegio, ese trayecto nos sirve todos los días para hacer importantes reflexiones sobre lo divino y lo humano. Ese día tocó sobre lo divino. Princesita me mira y me dice: "Mamá Dios está en el cielo y puede vernos", yo le digo que si por aquello de no llevarle la contraria.
Ella sigue con su diálogo:
-Mami Dios vive en las nubes.
-Si, Princesita vive en las nubes.
-Con los angelitos.
-Claro Mami, pero... ¿y que hacen allí todo el día"
Ufff... si ya vamos a empezar con las dudas teológicas..... tierra tragame.


Princesita está delante de un enorme plato de alubias...
-Mami.... ¿si me como esto seré grande?
-Si Princesita te harás grande y fuerte
-¿Llegaré al techo?
No ha dejado que la conteste cuando añade:
-Seré grande fuerte, lista y valiente como V (su profesora)
Yo le digo que claro y me suelta:
-Claro V es lista por eso es la profesora y tú eres la cocinera, por eso me haces las alubias.
(Pues bien.... resultará que solo valgo para hacer alubias y que yo no soy lista por eso no soy profesora jajaja....)


lunes, 17 de marzo de 2014

FUTURO

Me disponía esta mañana a intentar actualizar el blog después de no se cuantos días desaparecida…. Cuando escuchaba de fondo en la tele una noticia sobre “teleoperadores cualificados”, la cosa iba sobre que el mayor porcentaje de personas que trabajan en un call center son licenciados universitarios, personas que desempeñan un puesto muy por debajo de su nivel de preparación con un sueldo y horario bastante cuestionable.
Vivo en una ciudad universitaria donde la empresa más grande se dedica precisamente a esto…. Llevan la cuenta de un proveedor de telecomunicaciones y prácticamente toda persona joven que haya vivido aquí ha pasado por esta empresa. Tanto universitarios para costearse la carrera como personas que no encuentran otra cosa.
La tónica actual es contratar licenciados o diplomados.
Yo misma pasé por esta empresa cuando me vine a vivir definitivamente aquí, primero había que pasar por una formación sin cobrar de dos semanas, luego podían contratarte o no. En aquel momento te daban a elegir turno de media jornada, mañana o tardes. Reconozco que yo me consideraba bien pagada para ese puesto aunque para ello tuviera que trabajar festivos, fines de semana y demás… con turnos de 8 ó 9 días, pero con descansos buenos, teniendo cinco minutos de descanso cada hora y 20 para comer y no pudiendo levantarte ni para el baño salvo en esos cinco minutos.
Duré allí 6 meses, solo recibía llamadas, en mi puesto escuchaba a gente muy cabreada que llamaba para darse de baja con historias rocambolescas y yo tenía que intentar que se quedaran solucionando sus problemas siempre que pudiera…. Recibíamos cientos de llamadas diarias y la cabeza te quedaba medio loca…. Pero estaba contenta de estar trabajando y de que fuera solo media jornada, porque esto me permitía estudiar las oposiciones y con el sueldo de Papimelli vivíamos bien.
En aquel momento no se me ocurría pensar que todos los que estábamos allí deberíamos estar desempeñando un puesto superior con otras responsabilidades y otro sueldo…. Yo estaba contenta quizá por la inconsciencia de la juventud o que se yo.
Ahora muchos mataríamos por un trabajo así a pesar de que las condiciones que entonces eran medio buenas ahora son muy muy precarias, el nivel de estrés es insoportable y todo lo que tienes que aguantar es increíble, clientes muy cabreados que pierden las formas, insultos o llamadas de más de una hora que no puedes resolver ni pasar a nadie y que te las tienes que comer con patatas. Anécdotas muchas… sobretodo recuerdo el ir y venir de gente a la que despedían y contrataban, el miedo de mucha gente a que no te renovaran, la competitividad para ser el que más retenías para cobrar más sueldo, etc.

A día de hoy veo las cosas de otra forma, y me cabrea pensar que durante años se nos dijo que si estudiábamos, si sabíamos idiomas, si éramos constantes y si nos esforzábamos tendríamos un buen puesto de trabajo. Estudié y sigo casi en el mismo punto que hace años, y más aún ahora que teniendo dos hijos y estando aquí solos conciliar se me hace un mundo.
No tengo ese buen puesto de trabajo aunque si he tenido la suerte de trabajar de lo mío, no puedo quejarme porque a pesar de que las cosas están como están tenemos la suerte de que Papimelli tiene un buen sueldo y podemos vivir bien o al menos ir tirando sin problemas. Pero me siento un tanto defraudada, tal vez en una ciudad más grande hubiera tenido otras oportunidades que en esta ciudad pequeña donde todos se conocen y si no tienes padrino no te bautizan no llegan.
Pero ahora me preocupan más Repollete y Princesita, me pregunto que tipo de futuro les espera tal y como están las cosas. Leía hace poco un artículo en el que un señor que creo era filósofo y pedagogo decía que debían educar a nuestros hijos para que supieran enfrentarse a un futuro nada esperanzador. Y esa frase me asustó, porque me he dado cuenta de que he traído al mundo a dos niños cuyo futuro está negro, muy negro.
Hace un rato fui al ayuntamiento a pedir un papel y me encontré en medio de una conversación donde un policía local decía que la matrícula de la universidad de su hija le había costado este año casi 1800 euros teniendo en cuenta que su hija aprobaba todas las asignaturas, con esas cifras ¿Quién se va a poder permitir estudiar?... muy poca gente y algunos con esfuerzos sobrehumanos por parte de la familia.
Aunque más que el tema estudios me asusta la situación de muchos niños que según las noticias son cada vez más que no hacen ni una sola comida decente al día… ¿Qué será de la salud de esos futuros niños?
Algo que tengo claro respecto a mis hijos es que voy a educarlos en la austeridad, con esto me refiero a no darles todo ni a darles cosas porque si, quiero enseñarles que las cosas cuesta ganarlas, que no necesitamos tantos objetos materiales y que se puede vivir con mucho menos. Para ello intento que no tengan exceso de juguetes y no les doy todo lo que piden, ni siquiera para tenerlos callados. Yo cuando era pequeña me daban 25 pesetas el fin de semana para ir al kiosko, pero antes de dármelas tenía que haber colaborado con las tareas del hogar… recuerdo haber ahorrado durante meses para conseguir 200 pesetas para comprar un boli de diez colores…. Mi madre podía haber ido y comprármelo, pero a mi nunca me lo dieron todo porque si.
Si, me da miedo el futuro de Repollete y Princesita, me da pánico pensar que ahora tenemos que enseñarles a ser los mejores para ser competitivos y valer para todo para lograr un futuro trabajo…. Yo no quiero empezar a generarles ese estrés de intentar que sean los mejores, me niego a apuntarles a idiomas, música o deportes porque esto genere que sean más listos, porque yo quiero que sigan siendo niños y no llenarles de actividades tan pronto para que ya empiecen a competir por ser el mejor.
El mundo es cruel y competitivo… y no tengo nada claro que lo que le estoy dejando a mis hijos sea mejor que lo que yo recogí… creo que no podré engañarles diciendo: “hija estudia para tener un buen trabajo y no acabar subido en un andamio o fregando escaleras” porque la realidad es que aunque estudiar te abre puertas desgraciadamente no te garantiza nada.
Un amigo ingeniero, con dos masters está descargando cajas en el mercado, se levanta pronto cada mañana para hacer algo que odia pero que le permite malvivir, se está planteando emigrar a Alemania, aunque allí tampoco es oro todo lo que reluce, él sonríe cuando le pregunto que tal está y me dice que hay cosas peores como estar en el paro… y es entonces cuando yo recuerdo mi etapa de teleoperadora cuando salía de trabajar con dolor en la oreja de tanto escuchar y de tener puestos los cascos, cuando salía odiando todas las mentiras que me tocaba decir, cuando salía con sentimiento de culpa por todas las mentiras que había soltado esa mañana….
Nos toca vivir momentos difíciles, y al final agradezco que estamos todos sanos, que podemos ir tirando y que las crisis son cíclicas…. Pero hoy no he podido evitar pensar en el futuro de Repollete y Princesita.

lunes, 3 de marzo de 2014

CARNAVAL Y EL DERECHO A PONERSE ENFERMO

La semana pasada estuve algo desaparecida en estos lares, ni publiqué y apenas comenté o leí algún blog… ¿motivo? Un montón de dolores, tos, mareos y demás se apoderaron de mi y una vez más desde antes tres años fui consciente de que cuando una es madre y se pone mala antes casi que tiene que pedir permiso al personal a ver si se lo puede o no permitir.

La semana pasada Repollete y Princesita celebraron carnaval en el cole de mayores y para ambientar un poco el cole cada día nos tocó llevarlos de una forma diferente.
El lunes tenían que ir con unos calcetines vistosos… y como los que tienen son de invierno y son de lo más normales me lancé al chino de al lado a ver que tenía y creo que era todo de lo más discreto. Luego ya descubrí que 40 madres a parte de mi habían tenido la misma idea y que se habían quedado sin lo más hortera y cantoso.
Asique compré unos de estos que parecen hechos de toalla, unos rosas y otros azules, les cosí un montón de lentejuelas y botones y el lunes mis peques fueron al cole cada uno con un calcetín de un color y lleno de lentejuelas y botones.
Hago un inciso para deciros que un padre al ver que mi Repollete iba con un calcetín rosa tuvo a bien decirle: “Repollete esto ya no lo puedes hacer que el rosa es de niñas y maricas”. Yo me pregunto que necesidad tenemos con 3 años de meterles esas chorradas en las cabezas y también me pregunto si se puede ser más retrógrado…. En fín… mi Repollete le escuchó con el ceño fruncido y siguió a lo suyo.
El martes tenían que ir con un peinado diferente. Se me ocurrió comprar una bola de polvos de colores que tienen en Kiko para pintarse mechas… va acompañada de un fijador que hace que se prolongue más tiempo el color, pero yo lo que hice fue mezclarlo con gomina y brillantina y untárselo a Repollete haciéndole los pelos de pincho.
A Princesita le hice los mismo pero peinándola todo hacia atrás y recogiéndole el pelo en moños… parecía una chica de gimnasia rítmica, ella iba encantada y el resto de sus amiguitas alucinaba viéndoles el pelo azul y morado con brillantina, para las madres que pusieron cara de susto la cosa era: “ a ver como quitas luego esoooo”. Pues con agua y jabón señora, con agua y jabón.
Todos los niños iban con gomina y todas las niñas con lacitos o pinzas en el pelo…. Y los míos con ese look brillantina jajajaja, hecho en cinco minutos y mis hijos con una gran sonrisa al cole.
El miércoles debían ir pintados que parecieran mayores, mi idea era pintarles incluso arrugas en la cara, bigote y demás, pero me levanté con un grandísimo dolor de cabeza, tos seca y mareada, asique hice lo que pude y los mandé al cole para meterme en la cama.
Claro que luego me tuve que levantar otra vez con fiebre y todo para ir a recogerlos y pasar toda la tarde sola con ellos rezando para que no gritaran demasiado.
El jueves debían llevar una prenda del revés asique les puse la camiseta al uno del otro y luego puesta al revés.
Y el viernes por fin disfrazados, me hubiera gustado prepararles algo más original, pero fueron de princesa y de caballero medieval… muy guapos y apañados y tan contentos con su espada, su corona y todo el atuendo carnavalero incluido el exagerado maquillaje de los dos.
El ir cada día con algo diferente les ha encantado….
Pero a lo que iba yo es que una cuando es madre no puede ni debe ponerse mala, todavía cuando eran bebés lo tenía más fácil porque eran más fácil también controlarlos, ahora mis dolores de cabeza van acompañados de los berridos de Princesita y los gritos y risas de los dos cuando juegan, las carreras por el pasillo y el hecho de que te moleste hasta cuando te hablan.
Una vez más mi madre se ofreció para venir a echarme una mano porque sigo echa un cacharro y tengo tres días sola con ellos…
Hace unos días me encontré con unos conocidos de Ciudad de Donde Soy que viven enfrente mío en Ciudad de Donde Vivo y que también tienen mellizos y me decían que ellos nunca se habían sentido tan solos como desde que son padres, el echo de no poder conciliar, no tener a nadie para imprevistos, no saber que hacer con uno si el otro se pone enfermo…
Y es cierto, yo misma he sentido esa misma sensación de soledad muchas veces, el viernes me tocaba ir a recogerlos al cole estando yo mareada y sintiéndome fatal con tiritona incluida… pero ¿a quien le pido el favor?. Es complicado, muy complicado.
A día de hoy el balance es que Princesita está con tos y Repollete con fiebre y yo con una mezcla de todo. Papimelli sobrevive, no se como lo hace que él nunca enferma, sospecho que tiene ADN alienígena o algo parecido porque yo desde que tuvimos a los pequeños me he pillado de todo y el absolutamente nada.
Hoy y mañana mis niños no tienen cole, y estamos los tres en casa, yo tumbada en el sofá tapada con mi manta y ellos jugando… probablemente la cabeza me explote de un momento a otro, pero no puedo quejarme porque se están portando bien…. Bueno… todo lo bien que se pueden portar dos niños pequeños encerrados en casa sin poder salir.
A todo esto estoy de aire y lluvia hasta las mismas narices, dicen por aquí que a partir del miércoles veremos el sol y creerme que lo necesitamos porque llevamos un mes que me daba la sensación que vivía en Galicia con tanta lluvia.